Aunque las organizaciones puedan usar herramientas y tecnología para generar valor, son los sistemas formados por humanos que viven y respiran los que hacen que todo sea posible.

El coaching de equipos es una forma demostrada de mejorar el funcionamiento de esos sistemas humanos creando un entorno seguro y creativo para tener una ventaja competitiva.

Si eres un ejecutivo, un profesional del coaching o simplemente quieres empoderar a un equipo, a continuación te explicaré todo lo que necesitas saber sobre los modelos, las herramientas y las técnicas que utiliza el coaching de equipos para poder conseguir tus objetivos.

¿Qué es el coaching de equipos?

El coaching de equipos es el proceso que consiste en ayudar a los individuos y a los equipos a lograr sus objetivos.

Se puede aplicar en una gran variedad de entornos, incluyendo centros educativos (los profesores trabajando con sus alumnos), empresas (los directivos liderando a los trabajadores) y organizaciones deportivas.

Se basa en proporcionar comentarios a las personas sobre cómo lo están haciendo para que puedan saber cuáles son los aspectos en los que pueden mejorar.

Por lo tanto, el coaching de equipos tiene como objetivo ayudar a las personas a identificar esas posibles mejoras.

Además, les proporciona algunas herramientas que les permitirán resolver esos problemas por su cuenta, sin tener a un coach presente en todo momento.

A medida que esta práctica se ha extendido, se han ido desarrollando distintos modelos de coaching de equipos.

Estas técnicas y métodos tienen en cuenta las dinámicas de grupo y consideran aspectos fundamentales como la comunicación, la colaboración y la cultura.

Es posible que el ejemplo más conocido sean las Cinco Disciplinas del Coaching de Equipos de Hawkins, cuya propuesta sigue un enfoque multidisciplinar basado en cinco elementos clave en los que se hace hincapié para que el equipo pueda alcanzar el éxito en sus objetivos.

Mediante este sistema, los coaches apoyan a los equipos mediante:

Al ayudar a los equipos y a sus miembros a desarrollar estas habilidades, el coach los empodera para que puedan crear un entorno sostenible de alto rendimiento, creatividad y efectividad.

Beneficios del coaching de equipos

El coaching de equipos proporciona a las personas la oportunidad de resolver problemas concretos, desarrollar relaciones e innovar por el bien de la organización.

Se trata de un nuevo concepto en comparación con el coaching individual, pero su popularidad ha ido en aumento debido a sus claros beneficios, entre los que se incluyen los siguientes.

Desarrolla la consciencia colectiva

Proporciona a los miembros del grupo información sobre las fortalezas y las debilidades de cada uno.

Aumenta la inteligencia colectiva

Cuando se utiliza esa información de manera estratégica.

Mejora la comunicación

Reduciendo la cantidad de conflictos y cuellos de botella, además de prevenir el aislamiento del grupo con respecto al resto de la organización (silo organizacional).

Mejora la cultura de equipo

Ya que permite compartir, asumir riesgos de forma creativa e innovar.

Aspectos que permite desarrollar el coaching de equipos

El coaching de equipos no es igual que el que se realiza de manera individualizada. Implica el uso de técnicas y métodos que tienen en cuenta las dinámicas de grupo y que consideran aspectos esenciales como la comunicación, la colaboración y la cultura de grupo.

Además de los aspectos que contempla el coaching a nivel individual (como establecer objetivos, tomar decisiones, etc.), el coaching de equipos desarrolla otros como los siguientes:

Valores y propósito del equipo

Ayuda a los miembros a establecer un propósito colectivo relevante y una serie de procesos de trabajo, además de aclarar cuáles son sus valores y sus puntos fuertes.

Conexiones entre los miembros

Facilita las conversaciones dentro del equipo para compartir comentarios y mejorar la confianza.

En última instancia, esto lleva a aumentar la consciencia de los miembros sobre las fortalezas de cada uno. También permite determinar aspectos en los que se puede mejorar el rendimiento.

Consciencia sobre los demás

En este caso, el centro de atención se encuentra en las fortalezas y debilidades colectivas del equipo como parte de su entorno.

Por ejemplo, sería posible evaluar su rendimiento siguiendo un marco de referencia como el que se expone en las Cinco Disciplinas de Hawkins.

Los coaches pueden desarrollar estos aspectos en persona o usando una combinación de sesiones físicas y otras a distancia. La combinación de estas dos modalidades como parte de un programa de coaching mixto tiene las siguientes ventajas:

Estrategias eficaces de coaching de equipos para impulsar el éxito de un grupo

Ampliar tu repertorio de gestión mediante las estrategias de coaching de equipos que explico a continuación te ayudará a apoyar mejor a tus empleados y a convertirte en un gestor más eficaz para los miembros de tu equipo.

Conoce a tus empleados

Para ser un gran gestor debes conocer de verdad a tu equipo. Así que esfuérzate en conocer en profundidad a cada uno de tus empleados. Averigua cuáles son las fortalezas y las debilidades de cada uno: en qué destacan y cuáles son sus mayores desafíos, qué les motiva y qué les desanima.

Además de las pruebas formales de personalidad, puedes plantearte que cada uno de los miembros del equipo complete una autoevaluación regular con el fin de asegurarte de que usas a cada empleado de la manera más eficaz posible.

Fomenta la transparencia

Ser transparente con tus empleados contribuye a desarrollar la confianza, a establecer relaciones y a garantizar que todo el mundo esté en sintonía.

Si empiezas dando ejemplo, ayudarás a fomentar una cultura empresarial basada en la comunicación abierta. Para fomentar la transparencia dentro de un equipo puedes plantearte las siguientes preguntas:

Como ocurre con casi todas las cosas en un papel de liderazgo, no puedes esperar que los miembros de tu equipo hagan algo que tú no harías. Así que lidera dando ejemplo.

La colaboración es la clave

Los seres humanos solemos ser competitivos por naturaleza. Esto suele dar lugar a la competencia dentro de la oficina.

Sin embargo, si rechazas la competencia perjudicial y favoreces la colaboración y el reconocimiento de los logros del grupo frente a los individuales, no sólo podrás conseguir que el equipo salga adelante sino que también inspirarás a los miembros del grupo para que confíen entre ellos.

Establece objetivos claros

Establecer unos objetivos bien definidos es prácticamente imposible sin una planificación estratégica.

Así que para poner en práctica el coaching de equipos, después de reunir a tu equipo debes partir de la visión general y animar a los miembros para que debatan y propongan ideas que permitan lograr los objetivos a largo plazo.

Éste será un buen momento para aprovechar las fortalezas individuales y pedir dedicación, compromiso y creatividad al equipo.

Una vez que estén establecidos los objetivos más importantes, tendréis que desarrollar un plan que incluya hitos y métricas para que todo el mundo pueda rendir cuentas y para que puedas evaluar la cohesión y el nivel de progreso del equipo a la hora de alcanzar los distintos logros.

Celebra los éxitos

Celebrar los logros es una de las mejores formas de mantener a tu equipo motivado, inspirado y bien encaminado.

Por lo tanto, es una de las claves del coaching de equipos. Pero además de celebrar estos logros, debes esforzarte en destacar los éxitos individuales de los miembros del equipo.

Destacarlo todo (desde aniversarios relativos al trabajo hasta logros personales, pasando por éxitos a nivel profesional) es una potente herramienta para apoyar la motivación y la moral de los individuos y del equipo.

Desarrolla una confianza mutua

Un coaching de equipos que sea eficaz debe sustentarse en una confianza equilibrada. Aunque hay cosas (como el fomento de la transparencia) que pueden ayudar a establecer esta confianza, es posible que también quieras tener una política de puertas abiertas.

En concreto, deberías ser claro y amable en las reuniones, evitando ser crítico en todo momento. Y también deberías hacer un esfuerzo para demostrar a tus empleados que te importan, considerándolos como miembros valiosos del equipo e interesándote por ellos y por su éxito.

Allana el camino hacia el éxito

No puedes esperar que tu equipo funcione de manera eficaz sin sentar las bases para ello.

Por lo tanto, resulta crítico que tu equipo tenga acceso a la formación, el software, los recursos, las estrategias, los materiales y cualquier cosa que puedan necesitar para realizar su trabajo con éxito. Y si les falta algo, intenta solucionarlo lo antes posible.

Comparte comentarios constructivos

Al tratarse de uno de los aspectos más críticos del coaching de equipos, los comentarios pueden llegar a ser decisivos en el éxito (o el fracaso) de un grupo. ¿Qué han hecho bien tus empleados?, ¿cuáles han sido las estrategias que no han funcionado?, ¿qué es lo que hay que mejorar? Dar (y recibir) comentarios constructivos puede ser difícil.

Recuerda que debes transmitir tu mensaje con cuidado, esforzándote en mejorar esta capacidad y manteniéndote abierto a los comentarios de los demás.

Pide sugerencias y comentarios

Los coaches más eficaces siempre están abiertos a mejorar. Así que durante las reuniones y las sesiones individuales debes preguntar cómo puedes mejorar en tu papel como coach con el fin de ayudar a tus empleados a alcanzar los objetivos de rendimiento y de comportamiento que habéis establecido juntos.

Eso sí, debes mantener la mente abierta, ser flexible y no perder tu perspectiva.

Gestiona las disputas entre miembros del equipo

A pesar de tus esfuerzos por crear un equipo comunicativo y unificado, será inevitable que surjan conflictos entre los miembros del grupo.

Tanto si se trata de un problema debido a que ciertos empleados no aportan lo suficiente como si es un pequeño caso de acoso laboral, tu responsabilidad es mantenerte alerta ante posibles problemas de comportamiento dentro de tu equipo.

Además, debes esforzarte en comprender al máximo estos problemas y en implementar un procedimiento para afrontarlos y evitarlos en el futuro.

Características de un coach de equipos eficaz

No existe un único tipo de persona que sea un coach de equipos eficaz. Sin embargo, es importante tener en cuenta que los buenos coaches proceden de distintos campos, incluyendo la psicología y los negocios.

En este sentido, el coaching de equipos combina lo mejor de la gestión y la enseñanza, así que los coaches de este tipo deben saber cómo hacer las dos cosas.

Además, no se trata de una profesión en la que se pueda tener éxito de forma aislada: implica comprender las dinámicas de grupo y las relaciones interpersonales.

Como el coaching de equipos es un campo emergente, no existe un estándar universal para los coaches. Sin embargo, sí que hay ciertas características que comparten todos los que son realmente eficaces. Aquí tienes algunas de ellas:

Se centra en todo el equipo

Un buen coach de equipos es capaz de gestionar una sesión individual con cualquier miembro del grupo sin olvidarse de la visión general.

Por ejemplo, los coaches deben asegurarse de que lo que digan durante las sesiones individuales no contradigan los mensajes que transmiten a todo el grupo. Esto implica ser consciente de lo que dice cada persona y de cómo lo dice.

Tiene visión a largo plazo

El coaching de equipos no es un parche temporal: requiere una inversión a largo plazo de tiempo y energía para ver los resultados. Por lo tanto, será poco probable que los coaches que se limitan a perseguir objetivos a corto plazo lleguen a tener éxito.

Puede entender los distintos puntos de vista

Los coaches deben comprender en profundidad las distintas personalidades, antecedentes y estilos de trabajo de los miembros del equipo para poder tenerlo todo en cuenta en caso de que fuera necesario. Esto implica ser capaz de considerar un problema desde diferentes puntos de vista en lugar del propio.

Se basa en el pensamiento sistémico

Usar un enfoque basado en el pensamiento sistémico implica que el coach sea capaz de reconocer que cada acción de un individuo afecta al conjunto.

Esto supone que los miembros del equipo podrían estar ayudando o perjudicando a otros sin darse cuenta de ello, sólo porque no son conscientes de la forma en que sus acciones influyen sobre los demás.

Está cómodo frente a la incertidumbre

La predictibilidad puede ser algo fantástico, pero no funciona en el coaching de equipos. En este caso, el coach debe ser capaz de adaptarse con rapidez y afrontar cambios inesperados.

Por lo tanto, los coaches no deben tener miedo al cambio o a los desafíos a los que se puedan enfrentar, además de mantener una actitud positiva a la hora de probar cosas nuevas.

Es capaz de establecer límites

La labor de un coach de equipos requiere mantener relaciones cercanas con los miembros del grupo. Esto implica que los coaches deben establecer límites y asegurarse de que todo el mundo les respeta.

Se centra más en los resultados que en los métodos

Los buenos coaches de equipos son eficaces porque saben cómo identificar los aspectos problemáticos y desarrollan soluciones adecuadas para todos los que están implicados.

Esto requiere que se preocupen más por los resultados que por los procesos, ya que resulta fácil que los procesos se compliquen excesivamente durante las sesiones en grupo.

Está dispuesto a experimentar con ideas y técnicas nuevas

El coaching de equipos es un campo bastante novedoso, por lo que los coaches están buscando constantemente nuevas formas de ser eficaces.

Por lo tanto, es importante que estén abiertos a nuevas ideas y que estén dispuestos a experimentar con distintas técnicas.